El Mobile World Congress del año pasado fue un buen indicador del estado actual de la industria de la tecnología móvil. No solo de los nuevos y relucientes smartphones y tablets, sino del gran potencial de la tecnología móvil: interconectividad entre objetos cotidianos, todos controlados desde tu móvil; red 5G, todo más rápido y más potente; y la joya que captura la imaginación del mundo como ninguna otra: la realidad virtual.
La realidad virtual está preparada para sobresalir al Mobile World Congress 2017 en Barcelona. Es una tecnología que ha sido durante mucho tiempo trabajo de los escritores de ciencia ficción, pero ahora es el trabajo de los desarrolladores e innovadores que hacen de lo que un día fue ficción, realidad: una realidad virtual.
Actualmente hay unos cuantos jugadores notorios en el mercado de la realidad virtual, entre los cuales se encuentran Microsoft, Google, Sony, Samsung, HTC y más, para los que el punto focal de la tecnología es disfrutar de los juegos. Hace tiempo que el mundo disfruta de los videojuegos: desde los clásicos arcade operados con joystick hasta el streaming en 4K, ha habido un importante mercado con mucho espacio para el desarrollo durante casi medio siglo.
Uno de los objetivos principales de cualquier juego jamás creado para conseguir un producto final que los usuarios puedan disfrutar plenamente es sumir el jugador en el mundo que el juego ha creado. Ya seas los últimos defensores de la Tierra disparando a través de una hilera de torreones a los extraterrestres que descienden o vayas deambulando por un Boston destruido por una guerra nuclear en búsqueda de tu hijo secuestrado, un juego bien hecho te transporta a un mundo inventado y hace que te importe ese mundo.
La realidad virtual podrá conseguir eso como ninguna otra plataforma o tecnología ha podido hacer antes. La tecnología se apodera de todo nuestro campo de visión, transportándonos al mundo del juego hasta un límite que nunca hemos experimentado antes. Ponte las gafas y prácticamente no tendrás más opción que preocuparte por cada movimiento o sonido que experimentes en este nuevo y virtual mundo.
Los juegos son solo la primera parada para los usuarios de realidad virtual ahora mismo. Como producto comercial, la tecnología está todavía en sus inicios, con mucho desarrollo por venir. En un par de años, las maravillas del mercado actual nos parecerán poco más que herramientas primitivas e irritantes que resultarán ridículas por su simplicidad.
Si ya tienes unas gafas de realidad virtual puedes descargarte la app de realidad virtual de Netflix para disfrutar de su catálogo en streaming como si estuvieras en el cine. Aquí el gancho no es la interacción como en los videojuegos, sino una visualización más envolvente de la película o serie. Es como tener un cine IMAX en tu propio bolsillo.
Ahora mismo, todas las películas y series que conocemos y adoramos están diseñadas para que un espectador no participativo las consuma en una pantalla en 2D. Se cuentan las historias de manera lineal, con una introducción, nudo y desenlace concretos. ¿Qué aguarda el futuro para la narración en realidad virtual? En diez años podríamos estar viendo cómo las historias se desarrollan delante de nosotros en un universo en el cual podemos participar, movernos y observar desde cada ángulo antes imposible. El medio es el mensaje, como nos enseñó Marshall McLuhan mucho antes de la aparición de la realidad virtual, y un nuevo medio como este permitirá a los creadores de contenidos contar historias de formas nuevas e apasionantes.
Los beneficios de la realidad virtual no están confinados solo a la industria del entretenimiento, sino que se pueden utilizar en el mundo de la formación y la educación. Aprender a través de medios visuales es uno de los métodos más efectivos de aprendizaje, y puede ayudarte a entender y retener más fácilmente ideas complejas. Los estudiantes y aprendices pueden entrar a cualquier mundo virtual con el objetivo de ver ideas abstractas con sus propios ojos o interactuar con este mundo virtual y aprender con la práctica.
A parte de poder demostrar ideas y teorías abstractas de forma mucho más clara, el aprendizaje por realidad virtual será mucho más efectivo porque transmitirá esas ideas y mensajes más rápidamente que una lectura o una lección. Además, será muy rentable a largo plazo. Asimismo, está el hecho de que la realidad virtual es una experiencia cautivadora y divertida, por lo que las lecciones se mantendrán en el cerebro de los estudiantes durante más tiempo y sus ganas de estudiar no se pondrán en duda.
2017 será el año del éxito de la realidad virtual. Estamos esperando a ver, en magnífica visión de 360º, lo que queda por venir.