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Los estándares de un framework de interoperabilidad empresarial

Escrito por Núria Emilio | 03-oct-2023 8:30:00

En el complejo paisaje empresarial actual, las empresas se ven obligadas a operar con una multitud de sistemas para gestionar sus procesos. A medida que las necesidades de negocio aumentan, los programas y aplicaciones para darles respuesta también van en incremento. En este punto, los distintos tipos de interoperabilidad empresarial son, más que una ventaja, una necesidad

Conforme las compañías crecen, sus operaciones se expanden, lo que significa un aumento en tareas, personal y transacciones. Este crecimiento exige la adquisición de nuevos sistemas para manejar las operaciones empresariales. Sin embargo, el verdadero desafío surge cuando estos sistemas no están interconectados y no pueden compartir datos de manera efectiva. En este sentido, la interoperabilidad empresarial tiene cada vez más peso e influencia en el rendimiento de la empresa.

Por otro lado, las organizaciones manejan volúmenes de datos cada vez más extensos, que se almacenan en esa variedad de aplicaciones y sistemas. Esta diversidad puede conllevar problemas, ya que cada sistema tiene su propia forma de almacenar y gestionar los datos. 

Además, estos sistemas almacenan datos en formatos heterogéneos, lo que hace que la información sea prácticamente incomparable. Las empresas se enfrentan a la situación de tener múltiples sistemas, cada uno con datos dispares y estructuras diferentes. La diversidad en los formatos de datos crea una brecha de comunicación dentro de la corporación que se asemeja a una situación en la que un grupo de personas están intentando tener una conversación, pero cada una habla un idioma distinto. Cuando la interoperabilidad empresarial no es eficiente, los distintos departamentos de una empresa se pueden encontrar con barreras de acceso a los datos que les dificulten el intercambio de información, perjudicando el aprovechamiento de la inteligencia empresarial generada.  

La falta de comunicación efectiva lleva a problemas para consolidar información, gestionar datos maestros, conectar aplicaciones y compartir información con terceros. La disparidad en los formatos de intercambio, las convenciones de nombres y otros requisitos de datos hacen que sea necesario un intermediario para facilitar la comunicación entre estos sistemas.

En resumen, la interoperabilidad se ha vuelto crucial en el mundo empresarial moderno. Sin ella, las empresas se enfrentan a obstáculos significativos en la gestión de sus datos y operaciones. La capacidad de hacer que diversos sistemas hablen entre sí es esencial para garantizar un flujo de información eficiente y sin problemas en cualquier organización.

¿Qué es la interoperabilidad?

La interoperabilidad se define como la capacidad de los sistemas, equipos o entidades para intercambiar información y utilizarla de manera mutuamente útil, sin restricciones de acceso o implementación. En otras palabras, la interoperabilidad se refiere a la capacidad de diferentes sistemas, tanto internos como externos a la organización, para trabajar juntos, compartir datos y utilizar la información de manera eficiente.

La interoperabilidad es fundamental en diversos campos, incluyendo tecnología de la información, sistemas de salud, transporte y comunicaciones, ya que facilita la colaboración y la integración de diferentes componentes y sistemas para lograr objetivos comunes.

La interoperabilidad se erige como el cimiento tecnológico que unifica todos los sistemas y aplicaciones de un negocio. Está vinculada a la integración de datos y permite el flujo libre de datos entre diversas plataformas, transformando las prácticas empresariales. Facilita la colaboración entre departamentos, asegurando que todos compartan información y trabajen en sintonía. En esencia, actúa como un hábil traductor que integra información, haciéndola accesible, comprensible y valiosa en su totalidad.

Por otro lado, los procesos de interoperabilidad reducen las tareas superfluas y optimizan las operaciones, eliminando la necesidad de transferir información manualmente entre sistemas y, por ende, eliminando interrupciones innecesarias. En definitiva, la interoperabilidad también es esencial para liberar tiempo y acelerar los procesos, permitiendo que los equipos se concentren en actividades genuinamente productivas.

Además, la interoperabilidad se convierte en un recurso esencial para administrar los datos maestros, compartir información con terceros y consolidar datos de manera eficaz.  

Tipos de interoperabilidad empresarial

Para alcanzar una interoperabilidad empresarial completa, es esencial abordar tres aspectos clave:

1. Interoperabilidad Técnica: La interoperabilidad técnica se enfoca en la capacidad de los sistemas para compartir información en el ámbito empresarial. Esto implica la estandarización y la resolución de posibles problemas técnicos que puedan surgir entre sistemas y servicios informáticos. Es fundamental para la integración de datos y depende de servicios de conexión, middleware y seguridad. Este tipo de interoperabilidad garantiza que todos los miembros de una empresa puedan acceder fácilmente a las plataformas y sistemas de la organización, facilitando un intercambio de información seguro y ágil.

2. Interoperabilidad Legal: La interoperabilidad legal se relaciona con el valor socioeconómico de las tecnologías de la información (TIC). Para maximizar este valor, las entidades reguladoras deben generar confianza en las empresas y desarrolladores a través de estándares y plataformas abiertas. Con el aumento constante en las leyes y regulaciones internacionales, cumplirlas se vuelve cada vez más complejo para las organizaciones. La adopción de proveedores de servicios en la nube brinda ventajas significativas, ya que estos proveedores, con su experiencia y escala, pueden gestionar la interoperabilidad legal según los estándares internacionales vigentes, liberando a las empresas de esta carga.

3. Interoperabilidad Empresarial: La interoperabilidad empresarial se refiere a la capacidad de una empresa para intercambiar información con clientes, proveedores, socios externos y otros proveedores de servicios. Implica el flujo efectivo de datos entre la empresa y otras entidades, esencial para establecer conexiones y colaboraciones externas. En este contexto, la interoperabilidad se entiende como una red compleja de interacciones, desde la colaboración con socios externos hasta el nivel óptimo, donde el intercambio de información no conlleva costos significativos. Sin embargo, alcanzar este nivel de interoperabilidad no siempre indica optimización; su eficacia depende de una integración armoniosa con las circunstancias específicas de la empresa. La interconexión inteligente entre la interoperabilidad y las condiciones del entorno empresarial es clave para lograr una colaboración sin problemas y eficiente.

Estándares de interoperabilidad para empresas

Más allá de los tres tipos de interoperabilidad que las empresas deberían tener presente, los procesos de interoperabilidad implican una serie de normas y estándares que no se pueden obviar y que, además de permitir un flujo ininterrumpido de información, también fomentan la calidad de los datos empresariales y la data governance.

Las normas y estándares de interoperabilidad que una empresa debe cumplir pueden variar según la industria y el tipo de sistemas que utiliza. A continuación, se mencionan algunos estándares comunes de interoperabilidad que las empresas pueden considerar, dependiendo de sus necesidades específicas:

  1. XML (eXtensible Markup Language):

    • XML es un estándar ampliamente utilizado para el intercambio de datos estructurados entre diferentes sistemas. Es versátil y se puede adaptar a diversas necesidades empresariales.
  2. JSON (JavaScript Object Notation):

    • Similar a XML, JSON es un formato ligero de intercambio de datos que se utiliza comúnmente en aplicaciones web y servicios web.
  3. RESTful API (Representational State Transfer):

    • RESTful es un estilo arquitectónico de red para sistemas distribuidos, como servicios web. Utiliza HTTP para solicitudes GET, POST, PUT y DELETE, lo que facilita la interoperabilidad entre sistemas web.
  4. SOAP (Simple Object Access Protocol):

    • SOAP es un protocolo estándar para el intercambio de información estructurada en la implementación de servicios web. Define una estructura común para los mensajes y se basa en XML.
  5. HL7 (Health Level Seven):

    • HL7 es un estándar utilizado en el campo de la salud para el intercambio de información entre sistemas de información de salud, como registros electrónicos de salud y sistemas de información hospitalaria.
  6. FHIR (Fast Healthcare Interoperability Resources):

    • FHIR es un estándar moderno de HL7 diseñado para mejorar la interoperabilidad en el sector de la salud. Se basa en recursos y utiliza formatos de datos como XML o JSON.
  7. EDIFACT (Electronic Data Interchange for Administration, Commerce, and Transport):

    • EDIFACT es un estándar internacional para el intercambio electrónico de documentos comerciales, como pedidos y facturas, utilizado en el comercio internacional.
  8. OData (Open Data Protocol):

    • OData es un protocolo de acceso a datos que permite la interoperabilidad entre diferentes sistemas de datos, proporcionando un estándar común para las consultas y la manipulación de datos.
  9. PCI DSS (Payment Card Industry Data Security Standard):

    • PCI DSS es un estándar de seguridad para las transacciones con tarjetas de pago. Aunque no se centra específicamente en la interoperabilidad, es crucial para las empresas que manejan datos de tarjetas de crédito y débito.

Es importante que las empresas evalúen sus necesidades específicas y los estándares relevantes para su industria. Además, deben considerar las regulaciones y normativas locales, regionales y globales que pueden afectar los estándares de interoperabilidad que deben cumplir. La elección de los estándares adecuados dependerá del contexto y de los sistemas con los que la empresa necesita interoperar.

Conclusión

En un mundo empresarial cada vez más interconectado y dinámico, la interoperabilidad se ha convertido en un pilar fundamental para el éxito organizacional. En este artículo, hemos explorado las diversas facetas de la interoperabilidad empresarial, desde los estándares tecnológicos hasta los desafíos legales y organizacionales. La capacidad de los sistemas para comunicarse y colaborar sin restricciones no solo optimiza las operaciones internas, sino que también fortalece las relaciones con clientes, proveedores y socios externos.

Al adoptar estándares como XML, JSON, RESTful API y otros, las empresas pueden romper las barreras de datos y crear un entorno donde la información fluye sin problemas, impulsando la eficiencia y la innovación. Además, al abordar los desafíos legales y regulatorios mediante asociaciones estratégicas y el uso de proveedores especializados, las organizaciones pueden garantizar la conformidad y la seguridad en un entorno de datos cada vez más complejo y normativo.

La interoperabilidad empresarial no es simplemente una ventaja competitiva; se ha convertido en una necesidad. Las empresas que adoptan una mentalidad interoperable están mejor equipadas para enfrentar los desafíos cambiantes del mercado y aprovechar las oportunidades emergentes. Al centrarse en la integración tecnológica, el cumplimiento legal y la colaboración empresarial, las organizaciones pueden construir un futuro donde la información fluye libremente, impulsando la innovación, la eficiencia y el crecimiento sostenible en el mundo empresarial moderno.